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Mediación artística y cultural
Olga Lucia Olaya
Hemos dado grandes debates sobre la formación artística, en la escuela formal, en la no formal e incluso en la formación informal. No siempre sobre la formación cultural. Al parecer nos ocupa un principio de equidad en un campo de conocimiento de amplio espectro que debe ser atendido por especialistas en desarrollos comunicativos, cognitivos, en fruición estética y en comprensión e implementación de las complejas prácticas artísticas y culturales de la contemporaneidad.
Es así como la interdisciplinariedad perfila investigaciones sobre campos intelectuales, consumos culturales y vínculos entre sociedadcultura y políticas públicas. Los estudios culturales abren otros debates que nos permiten desentendernos de las incertidumbres, pero nos haceentendernos con la complejidad; coloca en el centro, el principio de la mediación, una acción pedagógica responsable en un campo de dialogo intercultural, donde los discursos, las acciones y visiones de las prácticas del arte, la cultura y el patrimonio, son objeto de procesos de apropiación de las diferentes instancias o instituciones como partícipes en el escenario de lo inter-relacional y vinculante.
La cultura abarca el conjunto de los procesos sociales de significación, o de un modo más complejo, la cultura abarca el conjunto de procesos sociales de producción, circulación y consumo de significación en la vida social (CANCLINI, 2004). Esta definición de cultura genera modos de construcción mediada por la interacción de sentidos y significaciones interculturales que devienen de una buena acción pedagógica.
De ahí la importancia que ha tomado los estudios sobre recepción y apropiación de bienes y mensajes en las sociedades contemporáneas, lo cual completa y remite hacia la mediación de lo sociomaterial y lo significante de la cultura, de lo cultural, de lo artístico y en ocasiones de lo estético.
Contamos con cuatro tendencias sobre las cuales opera la perspectiva procesual que considera lo socio material y lo significante de la cultura, en donde identificamos en primera instancia la cultura como el ámbito en la que cada grupo organiza su identidad, y como se reelabora el sentido desde la interculturalidad. Por otra parte la cultura es vista como una instancia simbólica de la producción y reproducción de la sociedad, o como una instancia de conformación del consenso y la hegemonía, o sea de la configuración de la cultura política y de la legitimidad. La cultura es la escena en que adquieren sentidos los cambios, la administración del poder y la lucha contra el poder. Y en último termino como dramatización eufemizada de los conflictos sociales.
Appadurai, (2001), prefiere considerar lo cultural como adjetivo, como una dimensión que refiere a diferencias, contrastes y comparaciones; permite pensarla menos como una propiedad de los individuos y los grupos, más como un recurso heurístico que podemos usar para hablar de la diferencia.
Nociones como territorio, relaciones comunitarias, concepciones del trabajo, la familia, y los modos complejos de simbolizar esos procesos sociales, refrendan la interculturalidad como patrimonio de estudio que media en los modos de interactuar entre las comunidades, poblaciones y grupos sociales.
Por una parte las perspectivas de formación desde la mediación cultural enunciadas ponen en los grupos de trabajo escenarios de interlocuciónmúltiple; no unidireccionales ni con verdades únicas, sino que es en la interpretación de los sentidos interculturales que se construye una mediación de alto impacto en el publico y en calidad de guía como ampliación de su propia experiencia al entrar en contacto con los procesos de producción, circulación y vinculo de las prácticas sociales que refiere el escenario visitado.
Los circuitos del arte, la cultura y el patrimonio se han ido ampliando a los sitios web, los centros comerciales, las calles de la ciudad, el sector rural, la televisión, el cine, las fiestas, los modos de relacionarse, en fin todo tipo de práctica social que incide desde un aparato orgánico que reivindica la diferencia; pero es la formación artística y culturl la que debe proceder por reducir la desigualdad, la inequidad; lo cual le hace portadores de actos justos de valoración democrática, donde la abundancia de información sea beneficiada por seres reflexivos, mediadores de símbolos, sentidos, significaciones interculturales legítimables, por su condición de diferencia, no de tolerancia, sino de asimilación conciente del dialogo entre el público, y lo público; el arte y lo artístico; la cultura y lo cultural; la estética y lo estético…
El museo y sus prácticas de exhibición, participación, circulación, consumo y apropiación vinculante con el público, establece retos de mediación cada vez más complejos en el escenario pedagógico. Lo sustantivo y lo adjetivo de la mediación artística y cultural genera un dialogo innegociable entre los sujetos, las sociedades y sus procesos civilizatorios; es la mediación artística y cultural, configuradora de memoria, diversidad y conciencia de territorio, invitoa aconocer los desarrollo en dos espacios de gran trayectoria educativa en los museos de Colombia.
Veamos ejemplos e interlocutores colombianos por su valiosa mediación en el contexto colombiano Daniel Castro, quien coordina a su vez
En el Museo Nacional encontramos a Nacy Avilan, como asesora de los programas educativos del Museo Nacional:
El Museo, además de cumplir con sus funciones curatoriales y de investigación, es también un espacio de disfrute y aprendizaje. Esta doble característica lo debe convertir en un lugar abierto y vivo, y por ende, en un espacio para la comunicación. Como alberga diversidad de objetos significativos, es depositario de un importante patrimonio cultural, parte integrante de nuestra memoria colectiva e identidad nacional. Pero sería en vano el trabajo de coleccionar, investigar, conservar y exhibir una serie de objetos originales, si no existiera la posibilidad de que el ser humano animara esos objetos y lograra establecer una comunicación sensible con ellos. (www.museonacional.gov.co).
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Referências Bibliográficas
GARCIA CANCLINI, Nestor. Diferentes, desiguales y desconectados. - Mapas de interculturalidad.
México: Gedisa Editorial, 2004.
APPADURAI, Argüí. La modernidad desbordada. Dimensiones culturales de la globalización.
Mexico: Ediciones Trilce, 2001.
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